domingo, 3 de noviembre de 2013

Muerte de vida en púrpura

Siempre en su hora. La muerte fría arribaba una y otra vez al campo de batalla, la muy suspicaz, refrescante se hacía sentir después del calor de cada vivir. Pálida de rostro y colorada de mejillas, maquillada venía gustosa que hasta portaba su mejor piel.

No retardaba a cumplir su labor. No hacía más que desprenderla del cuerpo que sufría; por mis manos, por mis ansias, por mi sed. La postraba a desvanecer. Sus funciones del ser excluía, en su ausencia, ya sólo era carne y hueso... resultado inanimado, ofrecido en homenaje a mi habilidad corpórea.

Así, entre sonrisas cortantes de suspiros robados era arrebatada de mis brazos, aunque de vez en cuando de entre mis piernas también. Pero lo que la muerte más apetecía era llevarla con quejidos causados por aquel mi objeto, el muy punzocortante, mismo con el que apuñalé indiscriminadamente su vientre.

Todo marchaba, todo andaba como debía, pero el tiempo entrometido comenzó a apresurar, hacía presente cada vez más consecuencias como aquella rigidez de un cuerpo post mortem. Su apuñalado vientre ya dejaba correr bastante vida, ensuciaba mi cuerpo, lubricaba la herida. Sus ojos hundidos y sus labios aún bastante rojos la hacían lucir suspendida en otro plano. Retenida en la brecha entre mirada perdida y la ausencia de luz. La muerte había ganado.

Recostada e inerte frente a mí, su cuerpo sin ánima me hacía observarla. Contemplaba mi calmo trofeo, hasta que… lentamente se comenzó a mover, refutaba su quietud. Obstinado cadáver activo, pensé. Pero extrañamente no me sorprendió su volver, ya nos era un hábito común morir y despertar. Tan empedernida acción que la practicábamos en repetidas ocasiones, algo ya inherente a nuestro lazo afectivo.

De ahí, como inhumanos e incomprendidos fuimos juzgados únicamente porque al mismo instante, la gente solía llamarlo orgasmo. Sin caer en cuenta que para nosotros no lo era así, siempre fue algo más, siempre fue algo, estrechamente ligado a una extensa variedad de pulsiones. Algo fortuito, exacto, adictivo. Algo entendido singularmente por ella y por mí… sin nadie más, sólo perteneciente de ella y yo.


domingo, 14 de julio de 2013

Amante de ti

Corro a tu encuentro en nuestro lugar especial, aquel escondido entre los vinos de jerez. Al llegar, te
 hallo oculta ante la tenue luz de la habitación. Luces tan bien, tan pasiva, tan sensual, aguardando allí
 en silencio por mí.

Sin decir nada, me acerco a ti y acaricio suavemente tu esbelto cuello. Después, a través de un ligero
 sonar me invitas a deleitar lentamente el momento, y yo sin objeciones sucumbo a tus encantos, pues
 adoro todo en ti.

Adoro el color de tu piel, tan cristalina y caoba, aun mejor que el de la miel. Adoro tu suave aroma, ese
 perfume tuyo cual ahora es mi idioma. Adoro tu dulce sabor, el mismo libar delicado retenido en mis
 labios con fervor.

Y con sutiles palabras que recaen en fanatismo, defino a cada virtud de tu existir como una 
provocación abocada a mi sentir, que, inexplicablemente, eso de ti inherente a la pasión me enamora
y me incita... a serle infiel.


Sueños comprimidos

Ella en un pequeño frasco traía mis sueños, presumía el poder. Hurtadora egocéntrica de fantasías.

Mis ojos se hundían, mi boca reseca anhelaba calmar su sed somnolienta, tanto así, que mi alterado cuerpo asemejaba a un saturado en taurina.

Ah, valla opresión, la perra no hacía más que orillarme a vender lo único que me quedaba ¿Y sólo por uno de mis sueños? Sí, sólo por uno de ellos, viaje astral sin restricciones.

Que aunque después de todo simples sueños son, siempre resultan de blanco lienzo psicótico, y yo, con un pincel bastante mórbido. De ahí que soy artista de letargos, experto escapista de inherente realidad.

¡Pero qué más! Pierdo mi tiempo, ya que tome mi carne, que devuelva mi mejor mente. No entiende que necesito soñar y crear, vivir sin despertar. Necesito ahora de eso, casi a tal forma en que ella necesita a lo itifálico.

Sólo quiero mi ausencia, que no se escatime mi reserva, que mientras yo me voy ella podrá hacerme venir.


viernes, 22 de marzo de 2013

Segundo aniversario de Gritos Inconscientes

Con agrado los saludo mis estimados lectores.

Un año más, como bien dice en el titulo. Caigo en cuenta de que ya ha corrido algo de tiempo desde aquel entonces en donde comenzó todo. Primero, un breve recuento de lo sucedido hasta ahora basándome desde el escrito del primer aniversario del blog. “A un año de la primer publicación” Teniendo en cuenta dicho post, puedo proseguir con lo que ha progresado.

Mejoré mi ortografía, de verdad lo hice. Aunque aún mantenga muchas fallas ya no son tan graves como anteriormente lo fueron, aunado a esto mi calidad de dicción también se vio en aumento. Ya usos oraciones más coherentes y hasta me tomo el lujo de integrar diversos sinónimos, nada más para que vean ;)

Con las menciones y las dedicatorias. Algunas personas van y otras vienen, algunas ya no permanecen activamente a mi lado (no diré quienes) pero lo más relevante es que les guardo aprecio por lo que fueron y por lo que aún son (y además por sus consejos). Por otro lado, a las chicas a quien dediqué en ese entonces el post, todavía siguen conmigo de la misma forma que estaban hace un año, aún las considero muy importantes en mi inspiración.

Pero no más retrospectiva, justo es tiempo de comentar cómo continua el blog tras bambalinas.

Cada vez escribo menos, es una realidad poco gustosa, y lo mismo sucede con la fotografía. Es porque he dedicado más tiempo a mi crecimiento en otras áreas como la profesional (así es, el pseudos-escritor/fotógrafo estudia Administración de empresas de ahí que las cosas se complican en ocasiones). Por eso he desaparecido mucho en cuanto a mi escritura, aunque no la he abandonado puesto que continuo en la elaboración de textos no publicables (osea muy personales).

Y bien, mi nuevo género desarrollado es el erotismo. Es interesante expandirme a dicha área, que ahora es lo más leído en mi blog desplazando a “El chico que soñaba con alcanzar la Luna”. Mi semántica ha resultado más certera conforme el tiempo anda, logro cautivar a más público y así lograr tocarlos a través de letras, es muy rico en experiencias el identificar como aquellos escritos orientados al libido han atraído un nuevo sector de lectores (principalmente mujeres).

Actualmente trabajo en una historia romántica-erótica, la cual planeo sea una obra muy superior a las demás, y cabe resaltar que estoy muy feliz de lo que ha estado resultando ahora que ya llevo poco más de la mitad.

By the way, si les importa, mi entrada favorita en el blog relacionada al erotismo es “Con las pupilas dilatadas y los labios rojos” ojala puedan leerla, pero sobre todo les recomiendo la sección “Favoritos” es el top personal, lo mejor de lo mejor, vienen de todos los géneros y son sumamente ricos en trasfondo, ADEMÁS DE MUY CORTOS ¿qué esperas? Ah, y también los invito a pasarse por mi blog de fotografía (A los ojos del Sol anfirrealista), espero les guste y les comento que absolutamente todas las fotos publicadas ahí son de mi autoría.

(Profundo respiro ...  )

Creo que lo único que queda es darles las gracias nuevamente, gracias por permitirme entrar en sus vidas mediante mis palabras.


Afectuosamente: Sr Sol


martes, 5 de febrero de 2013

Lágrimas y falta de sueño


Cuando tengo insomnio lloro. Con todas mis fuerzas lo hago, para profundamente quedar sin energías. Pero el único precio a pagar, es la consciencia alterada… reflejada en áspero letargo reclamado por los sueños.

Y por extraño que suene, llorar en mejor. Es mejor comparado a no poder dormir, que en insomnio la mente viaja sin tiempo-espacio. Allá, donde no hay lo que se llama realidad, donde todo juega en tu contra.

Razón perdida con rumbo a la deriva, cobijada entre malos recuerdos e intuiciones poco generosas (habitualmente referidas a ella). Siempre haciendo de mí extraviado, después de un viaje largo o cercano... y no me encuentro, y algunas veces, tampoco regreso.

Qué es la irrealidad sino la percepción contraria a lo real. Después de todo tan contigua a la verdad de esa propia falsedad, donde ambas, proveen la misma validez. ¿Cómo confiar de algo que sólo se fundamenta en percepción? Algo que nos gusta designar, a través de filtros vivenciales.

¿Cómo entregarse?, ¿cómo creer?, ¿cómo discernir?, ¿cómo confiar?... ¿cómo hacerlo?


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...