jueves, 14 de abril de 2011

Castillo de sueños (Escrito 2)


Las ideas son el principio de algo grande. Es increíble como una frase tan simple como “tengo una idea”, puede llevar mucho entre sus líneas. Las palabras a veces expresan más de lo que dicen, solo que uno mismo no toma un momento para analizarlas. Una idea no solo es una simple ocurrencia, es un conjunto de pensamientos ordenados y enfocados hacia un fin. Lo más denigrante es que la mayoría de los hombres no podrían idear algo, de no ser porque obtuvieron la inspiración de una vana musa. Me provoca repulsión reconocer esa verdad, pero no se puede hacer más que solo aceptarla, sobre todo porque yo también he caído ante una musa.


Me he dado a la tarea de ir recolectando historias. A pesar de tener la cabeza repleta de ellas, solo pocas han llamado mi atención. Un chico una vez me contó la historia de su Luna, aun me inclino ante su persistencia por alcanzar sus sueños. Yo no me siento capaz de juzgar si su sueño era estúpido o no, todos hemos tenido sueños surrealistas, pero solo pocos se han atrevido a cruzar esa línea que separa sus sueños de la realidad. La siguiente historia, la sustraje de un funeral. Al principio me porte déspota ante las palabras del joven hombre, pero al darme cuenta de que esta historia involucra nuevamente un amor casi imposible, mi atención fue reclamada. El relato de aquel hombre dueño de una cicatriz en el pecho, también fue vivido a través de una musa, pero lo que me intereso es que esta vez el final fue diferente.

Hace más de un año el joven llamado Axel, se casó con una linda señorita. Su vida era casi perfecta a lado de la hermosa mujer, pero había un problema que opacaba la radiante luz de  su musa. Angélica no era capaz de concebir una nueva vida, y ese fue el deseo más grande que tuvo desde que era una niña. El anhelo de poder tener un hijo, no era más que solo parte de un sueño más grande. Siempre soñó con que algún día ella tendría su propio castillo, donde podría vivir alegremente con su pequeño hijo y tener un apuesto príncipe a su lado, quien solo viviría con el fin de formar una familia. Ella soñaba con que su castillo sería diferente a los que alguna vez alguien allá creado, no le importaba realmente el aspecto, solo quería que fuese único. También parte de la ilusión, era que en el castillo su príncipe la estuviese esperando, para que al llegar este la envolviera entre sus brazos y jurara protegerla por siempre. Lo malo es que ella había perdido la esperanza por vivir, y él no podía recuperar esa ilusión que su amada había dejado partir. La ultima recaída a la realidad que tuvieron había sido hace unos días, donde después de intentar con un nuevo método de concepción, ella presento periodo… demostrando con esto el fallo de su intento. Así que Axel quiso hacer algo para demostrarle a su amada, que la esperanza debe morir al último.

Axel tuvo una idea magnifica después de haber sido inspirado por su amada musa, y decidió crear un refugió para los sueños de ella, sin importarle el costo de su decisión. Empezó por no contarle nada a su amada y compro una casa a las afueras de la ciudad, dentro de una zona boscosa. El lugar era ideal para poder alojar los sueños más hermosos, era tan alejado de la ciudad, que los problemas nunca podrían alcanzarlos. El bosque se portaría cómplice de los sueños refugiados ahí, los ocultaría con su neblina y luego los arrullaría suavemente con el cantar del viento entre las hojas. Él quería que en esa casa, su amada se sintiera segura al poder refugiarse de los problemas, así que ideo crear un castillo único. El castillo debía ser tan diferente a todos los que él conocía, entonces se tomó a la tarea de buscar miles de castillos, y con esto crear uno que no se pareciera a algún otro. Después de admirar todos los castillos que pudo encontrar, se imaginó uno totalmente diferente, y lo mejor es que era lo bastante sencillo como para poder hacerlo él mismo.

Comenzó a construirlo un fin de semana, ocultando su desaparición al decir que iría a un viaje de negocios. Poco a poco fue levantando la estructura, se tomaba unas 10 o 12 horas a la semana, repartiéndolas en diferentes días para evitar sospechas de Angélica. Estuvo construyéndolo  de esta manera durante tres semanas. Él sabía que tenía que terminar cuanto antes el castillo, así su amada podría recuperar pronto esa ilusión en sus ojos. Pidió ayuda a la madre de Angie, sugiriéndole que invitara a su hija a una semana de retiro espiritual. La madre accedió ser cómplice del hermoso obsequio hacia su hija, realizo una llamada a ella y logro que Angélica aceptara la invitación. Axel fingió sorpresa cuando su esposa le conto acerca del retiro, incluso le pidió solo para despistar que no fuera al retiro, ya que sabía que ella no rechazaría una invitación de este tipo. El plan fue perfecto, él tendría tiempo de terminar el castillo antes del próximo fin de semana, y así poder entregarlo el sábado siguiente. Una vez que Angie se fue de viaje, comenzó a trabajar arduamente todos los días en el castillo, diario dedicaba más de 5 horas a su construcción. Cuando termino de trabajar el jueves en la tarde, Axel se dio cuenta de que el castillo era más bello de lo que él había imaginado. Aun no estaba terminado pero  ya se podía apreciar su magnitud. El castillo era algo grande puesto que media alrededor de 7 metros, fue creado con madera y clavos en su totalidad, pero lo más importante… era totalmente diferente a otros. Su figura tenía forma de un triángulo,  y lo mejor era que justo en la punta tenía un mirador con sutiles pasamanos. Le faltaban unos pocos detalles para terminar, pero el viernes por la tarde podría realizarlos, solo era cuestión de reforzar el mirador en algunas conexiones y ligar algunas esquinas.

El plan consistía en que él mostraría a Sofía la mejor amiga de Angélica, el camino a la casa del bosque el viernes, justo después de salir del trabajo. Al día siguiente por la mañana Axel recogería a su esposa en el aeropuerto, pasaría toda la mañana con ella y en la tarde antes del ocaso él se despediría para acudir a una junta, dejando a su musa en manos de Sofía. Quien más tarde  la llevaría a conocer la nueva casa, presumiendo que esta sería propiedad de un familiar. Cuando llegaran a la casa, Sofía llevaría a Angélica al patio y al pedirle que entrara al castillo, ella se encontraría con su amado príncipe esperándola para envolverla entre sus brazos.  Axel sabía que sería algo demasiado cursi, comento que nunca hacia cosas así, pero esta vez iba a ser especial.

Llego el viernes y Axel recogió a Sofía después del trabajo. Para cuando él llego, Sofía ya lo esperaba fuera del trabajo. Una vez que Sofía entro al auto, Axel comenzó a contarle como imaginaba el encuentro con su hermosa princesa, describió detalladamente los gestos que tendría su amada al mirar su castillo. Todo el viaje se prestaba para que las ideas del día siguiente fluyeran fácilmente, mejorando aún más el encuentro romántico. Juntos fueron riendo todo el camino hasta llegar al bosque, y entonces el sueño comenzó a aquejar a Axel. Aún faltaba más de media hora de camino, entonces el joven se atrevió a pedirle a Sofía que de favor condujera. Por razones obvias ella no sabía aun donde quedaba la casa, pero no fue problema ya que Axel le explico cómo llegar desde donde estaban. Ella accedió y el joven se dejó perder en un suave letargo de sueños. Su sueño fue aún más inspirador, este trataba de una vida perfecta a lado de su musa, así que se aumentaron las ideas románticas dentro de la cabeza del joven soñador. Cuando de pronto un fuerte ruido detuvo todo por un segundo… Axel solo recuerda despertar un pequeño momento antes de volver a ser vencido por el sueño, lo único que pudo percibir durante ese corto tiempo fue sangre en sus manos, el frio suelo de la carretera en su rostro y vidrios regados por doquier, todo lo anterior de una forma confusa.

Cuando Axel volvió a abrir los ojos, se encontraba completamente desubicado. Al despertar, se dio cuenta que se hallaba sólo en la recamara de un hospital. Así que comenzó a tratar de levantarse, pero entonces el dolor le impidió lograr su cometido. Este era demasiado intenso, incluso lo obligo a retorcerse por encima de la cama. Después aumento su pulso cardiaco tan alto, que término por activar el cardiograma, avisando así el colapso interno que presentaba. Angélica salió del baño sorprendida y corrió directo a tomar la mano de Axel, unos segundos después una enfermera entro a la recamara para inyectar morfina en su cuerpo. Axel solo pudo sonreír de alegría al ver el rostro de su amada, y entonces cedió ante el sueño.

Pasaron pocas horas para que Axel volviera a tratar de recobrar la conciencia. Primero abrió los ojos sin poder enfocar nada a su alrededor, comenzó a sentirse mareado y con ganas de volver el estómago. La ansiedad se apodero de él al no saber lo que le pasaba, fue entonces cuando sucedió algo que le ayudo retomar la tranquilidad. La voz de su amada esposa, dejo oírse ante los oídos de él “Por favor mi vida, no intentes levantarte de nuevo. Estoy aquí contigo.” Esas palabras funcionaron mejor que cualquier calmante, para Axel ella era la única razón de vivir. El joven enamorado ni siquiera podía distinguir el rostro de su esposa, pero solo le bastaba con saber que ella estaba ahí. Lo primero que él pregunto fue que había pasado, entonces los ojos de Angélica se nublaron y su garganta se cerró, apenas permitiendo que las palabras salieran de su boca “Tuviste un accidente mientras ibas a la casa del bosque… y Sofía no pudo salir con vida de este. Estuviste en coma un poco más de tres semanas, desde entonces he estado aquí para ti, solo salí cuando fui a despedir a Sofí. Mi madre me conto acerca del hermoso detalle que tenías para mí en ese lugar, lamento que todo se haya tornado de esta manera”. Axel se sintió tan culpable por lo sucedido, y entonces aprovecho el momento para agradecer todo lo que ella había hecho por él. Angélica se sonrojo, limpio sus pequeñas lágrimas y después sonrió, dejando salir de entre sus labios unas suaves palabras “No te preocupes amor, jure estar ahí para ti en todo momento. Te amo como no tienes idea, y lo mejor de todo es que ya no solo seremos tú y yo. Después de todo lo que hemos tenido que pasar… el implante ha funcionado y ya tengo 3 meses de embarazo. ¡Vamos a ser padres!” Estas palabras llegaron en lo más profundo del joven enamorado, exigiendo unas pocas lágrimas en sus ojos.

Axel ingreso al hospital con miles de complicaciones médicas. Se golpeó en el pecho durante el accidente rompiéndose las costillas, dando como resultado un colapso en los pulmones. Más tarde sufrió un paro cardiopulmonar mientras lo trataban, obligando a los doctores a colocarle un marca pasos. Todo esto le tomo solo 5 meses para superarlo.  Incluso los doctores se sorprendieron del poco tiempo que le tomo recuperarse, pero  fue gracias a que presentaba una buena condición. Una vez fuera del hospital, Angélica le pidió que le mostrara el castillo. Ella había esperado pacientemente a que su príncipe en persona le abriera las puertas del castillo por primera vez, entonces se rehusó a visitarlo antes. Su madre se ofreció a cuidar de la casa hasta que Axel saliera del hospital, y prometió no tocar en lo absoluto el hermoso obsequio, entonces solo era cuestión de que los enamorados decidieran cuándo ir.

El fin de semana Angélica tomo el coche y siguió las instrucciones de su esposo, hasta llegar a la casa del bosque. Mientras manejaba se fascino al observar que la neblina cubría sutilmente todo a su alrededor, permitiendo así que el misticismo se apoderara de aquellos presentes.  Al bajarse del auto, los jóvenes enamorados se dieron cuenta en ese momento de que algo mágico y especial sucedería. Axel apenas podía contener las ganas de mostrarle a su amada, el pequeño detalle que había creado en su honor, así que no perdió tiempo y entraron a la casa. Al entrar notaron que esta lucia impecable, gracias a los cuidados que la madre de Angélica había brindado. El detalle mejoraba cada vez más y más. Todo era perfecto, incluso un poco de neblina se escabullo dentro de la casa, y al llegar casi al patio trasero, los arboles comenzaron a crear melodías a través del viento en sus hojas. Parecía que todo se había vuelto cómplice del detalle. Una vez que abrieron la puerta del patio, los dos quedaron sorprendidos con lo que sus ojos observaron. El castillo… lucia aún más hermoso ahora que el tiempo lo había decorado, enredaderas cubrían ligeramente sus paredes, la neblina entinto la madera de un tono oscuro, los arboles adornaron con sus hojas el camino y por si fuera poco, las nubes en el cielo crearon pequeños crepúsculos, alumbrando tenuemente diferentes partes del castillo. No podía ser  aún mejor, el sueño de Angélica se vería real al fin. Ella de nuevo dejo salir lágrimas de sus ojos, pero esta vez fueron de alegría, ya que por fin había encontrado un lugar donde pudiera refugiar sus sueños. Comenzaron a caminar tomados de la mano hacia el castillo por encima de las hojas rojas, para después entrar a este. Una vez dentro Axel envolvió a Angélica entre sus brazos, después acerco sus labios a ella y recito unas palabras “Juro protegerte por siempre”. Angélica no pudo hacer nada más que abrazarlo con intensidad, perdiéndose entre los brazos de su amado. Axel sonrió y le dijo que lo mejor aún no sucedía. Angélica seguía sin poder creer que esto fuera real, entonces solo siguió de la mano a su príncipe. La hizo subir despacio a través de unas escaleras de caracol en medio del castillo, cuidando ante todo a su pequeño bebe dentro del vientre. Cuando subieron al mirador, lo primero que admiro Angélica fue lo hermosa que lucía la vista desde ahí, a pesar de los árboles, se podía ver la ciudad a lo lejos. Angélica respiro fuertemente, cerró los ojos unos segundos y se recargo en uno de los barandales, para girar mirando con sus ojos llenos de ilusión a su esposo. Axel se sintió completo al fin, todo el esfuerzo había valido la pena y ahora que Angélica esperaba a un bebe lucia aún más preciosa. Él también tenía un ganas de llorar de alegría, pero se dio cuenta de que el momento reclamaba fuertemente un beso entre los ellos. Angélica levanto la mano y llamo en forma seductora con sus dedos a Axel. Él miro fijamente a los ojos de su esposa y se dispuso a dar un paso, de pronto… uno de los barandales se rompió, haciendo que Angélica cayera por un costado del castillo. Axel intento detener la caída, pero no pudo alcanzarla con la mano. En su lugar solo quedo colgado de la torre, obligado a presenciar como Angélica rompía una de las paredes  del castillo al caer, terminando dentro de este. Axel corrió lo más rápido que pudo a través de las escaleras. Al llegar al suelo, no pudo aceptar lo que vio frente a él… su esposa aún continuaba agonizando. Axel cayó en shock, solo abrazo fuerte el cuerpo de su amada y comenzó a llorar vaciando lentamente su alma. Angélica había golpeado su cabeza contra uno de los soportes de madera, pero tomo más tiempo para que su muerte se hiciera presente… solo pocas personas tienen el privilegio de no morir lentamente. Lo más trágico es que su primogénito también murió en el accidente. Los doctores dijeron que su muerte fue instantánea, ya que el cuerpo de Angélica golpeo con su vientre el  suelo. Después del suceso, la madre de Angélica cayó en depresión al igual que Axel. La diferencia fue que Axel no solo tenía que lidiar con la culpa que sentía, su suegra fue declara interdicto… por lo tanto se determinó que era incapaz de tomar decisiones por sí misma. El joven se hizo cargo de ella todo este tiempo… hasta ayer. La madre de Angélica termino por arrogarse a las vías del tren.

Acabo de llegar del funeral donde conocí al protagonista de la historia. El funeral fue hecho en honor a la madre de su musa. Yo asistí por razones de negocio y me extraño ver solo a un par de personas en el funeral. No tarde en darme cuenta, que a pesar de haber más gente a su alrededor, él se encontraba solo. Es culposo confesar que no me interesaba su historia en lo más mínimo, pero fue algo diferente lo que aquel hombre me transmitió a través de su relato. Un amor imposible por tener un hijo y una idea de volver realidad un sueño maravilloso, todo inspirado en una musa. Sé que el castillo posiblemente no era tan hermoso como él lo describió, pero para mí es suficiente saber lo que este simbolizaba para la joven pareja. Para terminar con el toque perfecto a la historia, el joven hombre confeso no haber perdido la esperanza y la fe, en que su Dios tenia para él otros planes… me recordó totalmente al relato bíblico de Job. Aun después de perderlo todo, él sabe que su Dios nunca lo desamparara.

Siempre hay que recordar, que el día nació de la noche.

jueves, 7 de abril de 2011

Retribución (Robado a Luna)


Mátalos, destrúyelos,
Todos uno a uno.
Que caigan,
y que rueden sus cabezas.

Solo venganza, adiós dolor.
Que sientan lo que sientes...
 ahora ya somos dos.

Grita fuerte, llora y corre.
Ve por todos… poséelos.
Tú eres más, tú eres mejor.
No pueden contigo.

Disfruta el momento,
disfruta su dolor.           
Has que sepan por qué lo haces.

No temas que estoy aquí.
Corre conmigo,
y acabemos con todos.
Tú no necesitas a nadie más.

Hazlos que te escuchen,
hazlos que escuchen sus llantos,
y tú solo escúchame a mí.

Tu voluntad,
y sus ganas de vivir.
Serán…
su única esperanza.


Basado en un poema de la hermosa Luna... (Derechos de autor robados)
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